Presentación:
La intervención psicológica a través del flamenco produce beneficios empíricamente validados sobre el malestar psicológico a través de un lenguaje universal que une cuerpo y mente, llegando hasta donde la palabra es insuficiente. A través de intervenciones grupales basadas en el arte flamenco en una clínica multidisciplinar se puede mejorar la salud mental de forma integral. De esta forma se crean nuevos espacios terapéuticos dirigidos a toda la población donde se utiliza el flamenco como medio de expresión emocional y cohesión social.
Antecendentes:
Matilde Melanotte, Psicóloga Sanitaria y bailaora y creadora del proyecto Flamenca Mente® imparte talleres desde el 2018. Hasta ahora en España y en el extranjero se han dirigido a 45 niños y niñas con y sin discapacidad, 80 pacientes adolescentes y adultos con un trastorno de la conducta alimentaria en régimen de hospitalización, 14 madres con conflictos familiares y 5 grupos inclusivos de 10 adultos con y sin discapacidad física y trastornos mentales graves. La sociedad Española de Psicoterapia y Técnicas de Grupo en 2021 otorgó a Flamenca Mente® el Premio Nacional a la mejor intervención grupal en el ámbito de la psicoterapia de grupo, por una intervención grupal inclusiva a través del flamenco en población infanto-juvenil con diversidad funcional y necesidades educativas especiales. Flamenca Mente® goza de la primera publicación científica experimental sobre las potencialidades terapéuticas del flamenco. El estudio de Melanotte et al. (2020), investiga los efectos de un programa de flamenco complementario a una escuela de madres en el autoconcepto, la ansiedad, la ira y la depresión. La muestra fue de 14 mujeres entre los 36 y los 50 años que acudían a una escuela de madres. La mitad de ellas recibió 6 sesiones de flamenco, mientras que la otra mitad sirvió de grupo de comparación. A través de un diseño mixto se compararon las medidas pre y postintervención y entre los dos grupos. Un psicoterapeuta, un Equipo Reflexivo y una bailaora de flamenco estudiante de Psicología, la futura directora de Flamenca Mente®, dirigieron las sesiones. Los resultados demostraron que el autoconcepto físico, medido a través del cuestionario AF5, mejoró sólo en el grupo que acudió a las sesiones de flamenco, con un tamaño de efecto grande (p < .05, η² parcial = .29). En cuanto a los grupos inclusivos de adultos a los que se impartió el taller, el 100% refirió sentirse mejor psicológicamente después de la intervención. Por lo que se refiere a la población adolescente y adulta con TCA, el taller ha sido introducido en un sistema terapéutico multidisciplinar y han sido reconocidos sus beneficios por la supervisora de los talleres quien destacó la conexión con el cuerpo a través de la expresión emocional, la atención en el momento presente, la flexibilidad y la autoría, además del apoyo grupal.
Justificación de su necesidad o conveniencia:
A pesar de que el estigma sobre la salud mental sigue existiendo, con la pandemia el malestar psicológico se ha hecho más agudo y su cuidado aún más necesario. Introducir el flamenco como intervención terapéutica atrae incluso a las personas más desconfiadas a empezar un trabajo terapéutico alejándose de los prejuicios sobre ello. Implicar el cuerpo y la música en el proceso lo hace más completo y divertido. Los talleres grupales, inclusivos e intergeneracionales crean nuevas redes sociales de apoyo, fundamentales tras meses de confinamiento y aislamiento social. Como subrayan las Naciones Unidas (13 de Mayo de 2020) frente a la crisis de la COVID-19 hay que ofrecer servicios de salud mental a toda la sociedad, teniendo en cuenta la exacerbación de las diferencias sociales y las minorías más afectadas. Además, la activación conductual que conlleva este tipo de intervención mejoraría el sedentarismo y sus secuelas físicas y psicológicas. Flamenca Mente destaca por su compromiso científico, ya que existen muchos cursos que venden un servicio parecido pero sin la ética o la formación necesarias para proteger a los usuarios. Es uno de los primeros intentos científicos oficiales de acercar el flamenco a la psicoterapia. Las evidencias científicas en las que se basa el proyecto permiten ofrecer un servicio ético y eficiente, sin dañar a las personas a las que se dirige.
El flamenco como instrumento terapéutico:
En cuanto a los beneficios psicológicos del arte flamenco, diferentes autores destacan la riqueza musical de los estilos del flamenco como elemento que estimula la introspección (Torrubia, 2010). Los diferentes palos del flamenco, abarcando todo el abanico de las emociones humanas, expresan con sencillez lo cotidiano a través de intenciones, ritmos y letras ritualizadas. El sentimiento se plasma en los gestos flamencos, muy cargados emocionalmente que llegan de forma inmediata al espectador porque reflejan expresiones populares y posturas características de determinadas emociones. De esta forma, el baile flamenco facilitaría la expresión de emociones negativas bajo una nueva forma más constructiva y creativa, favoreciendo una mejor contención y regulación emocional (Koch et al., 2019). Anteriores investigaciones que estudiaron los efectos del uso del flamenco como instrumento terapéutico encontraron una mejora de la autoestima y del autoconcepto físico (Navarrón et al., 2010; Melanotte et al., 2020), del bienestar, de la salud percibida y de la sensación de dolor físico (Koch et al., 2019). Diferentes autores subrayan la necesidad de un abordaje a través del cuerpo cuando la comunicación verbal resulta afectada (Rojas- Bermúdez, 2017; Koch et al., 2019). Andrao, M., & Bonichini, S. (2018) subrayan además otros aspectos interesantes, en cuanto la música acompaña la danza en el aquí y ahora, la danza facilita un cambio atencional hacia el momento presente creando un tiempo y un espacio en los que los pensamientos intrusivos no entran. Rojas Bermúdez (2017) hace hincapié en el carácter innato de la danza como instrumento universal de comunicación, a través del cual emergerían aspectos personales a través de gestos, movimientos y posturas propias y no siempre conscientes. Las terapias artísticas, la intervención a través de la danza y la danzaterapia comparten entre ellas distintos elementos terapéuticos específicos y diferentes de otras formas de movimiento (Koch & Koch, 2018) como el hedonismo, entendido como placer y juego; la posibilidad de generar significados no verbales; promulgar un espacio de cambio proactivo a través de rituales y role-playing, entre otros, y la posibilidad de crear y autoafirmarse.
Objetivos:
- Generar un espacio de disfrute, desconexión y reflexión
- Mejorar las capacidades cognitivas primarias (atención, concentración, memoria, comprensión)
- Desarrollar la comunicación verbal, musical, corporal
- Trabajar la motricidad fina y gruesa y del control del movimiento
- Desarrollar la imaginación y creatividad
- Mejorar el autoconcepto físico
- Estimular la socialización y mejorar las habilidades sociales
- Trabajar la gestión emocional asociada a los diferentes estilos de flamenco
- Analizar de dinámicas grupales y favorecer la cohesión grupal
Participantes:
Un mínimo de 6 y un máximo de 10 adultos, con exploración de la historia clínica previa si son pacientes del centro, para tener en cuenta patologías físicas y psicológicas.
Encuadre: Se utiliza una metodología sicodramática, con sesiones de cadencia semanal con una duración de hora y media. Los encuentros se desarrollarán de marzo hasta junio, siendo la primera sesión de toma de contacto y de establecimiento del contrato terapéutico y la última de cierre. Tras una o dos sesiones de acercamiento, el grupo de cerrará para facilitar que emerjan y se trabajen temas personales, desde la confianza y la confidencialidad.
Estructura de la sesión: 30 minutos de caldeamiento: se favorece un primer diálogo bailado o verbal, la conexión con espacio y con el cuerpo 30 minutos de dramatización: se trabajan los contenidos que surgen de la fase anterior a través del movimiento flamenco 30 minutos de comentarios acerca de lo que se ha experimentado en la sesión
Materiales: Dos sillas, un equipo de música, telas de diferentes colores.
No es necesario llevar ropa de flamenco.
Honorarios: 20 euros por persona la sesión